Lo habíamos advertido, si privaban la sensatez y los ánimos de eficacia y unidad, Leonel Luna, sería nombrado coordinador del PRD durante la próxima VII legislatura en la ALDF. Y es precisamente lo que sucedió, los perredistas definieron como su líder al ex jefe delegacional de Álvaro Obregón quien será acompañado en su desafiante tarea por Raúl Flores, dirigente local perredista, en la vicecoordinación.
Luna entregó buenas cuentas en los pasados comicios y tejió su coordinación con ánimos constructivos que fueron reconocidos.
Pero para que esto sucediera, el papel que jugó Mauricio Toledo, ex jefe delegacional en Coyoacán, fue clave. En los hechos Toledo se convirtió en el operador para que la difícil negociación se diera en armonía y sin sobresaltos.
Más aún, en los pasillos del PRD capitalino se menciona que Toledo tiene todo el respaldo de Luna, Flores y de Héctor Serrano, hoy titular de la Secretaría de Movilidad, para convertirse en el operador clave en la legislatura que está por iniciar. En este sentido será la pieza leal del GDF en la Asamblea Legislativa.
Los propios chuchos saben que Toledo operó a favor de Luna y Flores en este proceso interno del PRD y que, a falta de reconocimiento de Nueva Izquierda (NI), Héctor Serrano se ha convertido en impulsor de la carrera política del ex jefe delegacional de Coyoacán. A cambio, Toledo ha sido leal al ex secretario de gobierno del DF, a quien por cierto llama "tío" por respeto.
En este sentido y dados los resultados, Miguel Ángel Mancera, jefe de gobierno capitalino, sabe que además de Raúl Flores quien ha sido fiel en las batallas electorales, ha encontrado en Mauricio Toledo a un operador eficiente y confiable.
Lo importante, para los perredistas capitalinos, es que salió adelante un proceso interno –que amenazaba con ser un infierno de grillas- a través de la estabilidad y la unidad. Luna garantiza liderazgo y cohesión, todos coinciden.
Por cierto, uno de los aspirantes a la coordinación, Victor Hugo Romo, quedó descartado porque, nos cuentan los propios diputados electos perredistas, reflejó ser un político que no sabe jugar en equipo. Por eso la decisión se inclinó a favor de Luna. |