Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alertaron sobre la posibilidad de que en el oeste del país un “enjambre sísmico”, un conjunto de temblores pequeños en su mayoría imperceptibles para el ser humano, provoque el nacimiento de un volcán.
La advertencia ocurre después de que se registraran más de 4 mil 102 sismos desde enero de 2020 hasta la fecha en el estado de Michoacán, una región destacada por su actividad volcánica.
En una conferencia virtual, Carlos Valdés González, investigador del Instituto de Geofísica (IGEF) de la UNAM y actual director del Centro de Estudios Mexicanos (CEM) UNAM-Costa Rica, aseguró este martes que es “fundamental vigilar y monitorear estos enjambres sísmicos”, pues son “uno de los precursores del nacimiento de un nuevo volcán”.
“Pueden representar riesgos para la población local si se presentan acompañados de otros factores” afirmó.
Agregó que para que “ocurra una erupción volcánica o el surgimiento de un coloso, se requiere actividad sísmica, deformación del terreno, emisión de gases, manifestaciones hidrotérmicas y alteraciones visibles”.